jueves, 13 de agosto de 2009

Sindrome de Mozart


Irene es una chica de 18 años que es aficionada a la música, especialmente al violín. Cuando era apenas una niña, sus padres creían que era un genio para la música, pero cuando fue creciendo tuvieron la decepcionante sorpresa al saber que sólo tenía mucho talento. Desde ese momento comenzó a tener una relación muy distante con su familia. Yarchik, su mejor amigo, viene desde Hungría y es muy diferente a los demás adolescentes, por su pensamiento y además por su gran oído musical.

Este verano debe pasarlo en Cansares, un pequeño pueblo, con toda su familia durante un mes.

Cuando Irene llega a Cansares, descubre que sólo la habían llevado allí para que ayudara a su padre a estudiar a un chico que padece una enfermedad llamada "Síndrome de Williams", llamado Tomi. La enfermedad consiste en que la persona que padece aquello tiene un gran oído musical, aunque es discapacitado psicológicamente. El padre de Irene piensa que Mozart puede haber sido víctima del síndrome, pero para probarlo le pide a su hija que se acerque a él para poder investigarlo.

Pero Irene al conocerlo descubre que es un niño muy bueno, sensible y que tiene mucha facilidad para la música. Ambos se conocen y terminan siendo amigos. Poco a poco, Irene se enamora de Tomi; se da cuenta de que es un genio de la música y que puede practicar cualquier instrumento sin dificultad. A pesar de ello, decide no ayudar a su padre ya que es muy frívolo con su amigo.

Un día Irene graba a Tomi tocando por primera vez un piano y se sorprende porque nunca había tomado lecciones de aquel instrumento y lo tocaba sin ninguna dificultad. Aunque tiene un gran dilema, decide no dar a su padre la cinta ya que habría estado utilizando a su amigo para obtener información. Toma la difícil decisión de darle la cinta a Tomi y le dice que decida él sobre su futuro; si dejaba que el padre de Irene oyera la cinta, su vida cambiaría, desarrollaría aún más su oído musical; pero si decidía no exponer su talento, su vida seguiría igual para siempre...